Honra a otros y Dios te honrará
Ámense los unos a los otros con amor fraternal, respetándose y honrándose mutuamente. (Romanos 12:10) Cuando nos preocupamos por recibir honra contaminamos nuestro servicio. Ayuda al prójimo con gusto, no esperes retribución y Dios te sorprenderá.